22 feb 2010

RUTA CIRCO DE GREDOS





El Pasado día 20 de Febrero nos decidimos por hacer una ruta de senderismo en la nieve Jesús y yo. Estuvimos cuadrando el calendario de forma que pudiésemos ir el Sábado en lugar del Domingo ya que aunque parezca una ruta muy sencilla, en verano o primavera, cuando se trata de ir por la nieve, la cosa cambia, pues hay que realizar un esfuerzo extra a la hora de subir y si no dispones de raquetas o crampones para poder acceder a los sitios, lo normal es que te hundas hasta la rodilla como fue nuestro caso. Era muy fácil convencerle y además le dije que así hacía como los ciclistas, oxigenaba la sangre en altura y era muy buen entrenamiento de cara a su cercano maratón de Barna.


La temperatura es muy importante a la hora de hacer la ruta, pues si empezamos a primera hora de la mañana, la nieve estará todavía congelada y nuestro avance será más rápido (siempre con crampones) que si empezamos sobre las doce, la nieve se reblandece y te hundes salvo que lleves raquetas para poder avanzar por esta.


Utilice esta ruta ya que esta muy bien marcada, es la que hace todo el mundo y por tanto, en todo momento nos encontraríamos con algún grupo que nos sirviese de guía en el recorrido. Me serviría perfectamente para que Jesús tuviese su bautizo en esto de las rutas por nieve. (Calculamos a ojo mirando las señales que nos indicaban el recorrido que en algunos puntos tendríamos un espesor de cerca de un metro y medio de nieve).


Para poder llegar hasta aquí, para los que somos de Polán, tenemos que ir hacia Talavera de la Reina, coger la N-V dirección a Badajoz y cuando pasamos la zona de Talavera de la Reina, coger el desvío en dirección a Ávila, Arenas de San Pedro (N-502). Cuando llegamos al Pueblo de Ramacastaña, nos desviaremos a mano derecha en dirección Cuevas del Valle- Avila, subimos el Puerto del Pico y cuando empezamos a bajarlo, a un par de kilómetros nos saldrá un cruce a mano izquierda que nos llevará al Parador Nacional de Gredos y hasta Hoyos del Espino (CL-500), de donde sale la carretera de la Plataforma, nuestro punto de destino. (Hay una cabra montesa en un pedestal para indicarnos que carretera tenemos que coger para llegar a la plataforma, independientemente de las señales de tráfico).


Ni que decir tiene y sobre todo se nos tiene que quedar muy bien grabado el hecho de que ir a la Montaña es peligroso y en invierno más sobre todo si no cumplimos una serie de requisitos básicos y si intentamos saltarnos el más básico de todos, es decir, EL SENTIDO COMÚN. (Jamás debemos ir solos a la montaña y hay que tener controladas en todo momento las nubes y la meteorología para ese día, sobre todo si queremos hacer alguna cumbre, por muy sencilla que sea). Es un paisaje muy bonito pero lo más bonito de todo es poder contarlo después con los amigos enseñando las fotos y contando las anécdotas. Nosotros hemos utilizado materiales de montaña específicos para la nieve, como por ejemplo botas y abrigos de Gore-tex, Gafas de Sol con filtros ultra-violeta, crampones y bastones para el hielo,… en la mochila llevamos comida y agua para el día y algo más por si acaso, una muda seca, cortavientos o chubasquero, el móvil a tope de batería, un frontal y un mechero. (me faltó en esta ruta la brújula y el silvato, que pesan poco y no ocupan espacio).


Todos estos pequeños detalles son los que marcan la diferencia entre realizar un tranquilo paseo por la nieve a poder tener serios problemas si de golpe te cambian las condiciones meteorológicas. En nuestro caso, la aparición de unas nubes en la cumbre del Almazor fue el motivo de acortar nuestra ruta, es más, la gente que subió al Morezón o al puerto de Candeleda se vio sorprendidas por una niebla muy densa de repente. Fuimos comentando que detrás de nosotros ya no venía nadie más, es decir, o bajaban al refugio Elola o se habían dado la vuelta en su intento de pasar una jornada en la nieve. Empezamos con un sol impresionante a primera hora de la mañana y mientras nos cambiamos en el coche y nos poníamos ropa seca estaban cayendo copos de nieve.


No es que sea exagerado, prefiero pecar de prudente puesto que hay que disfrutar de nuestro tiempo de ocio, pero es que todos los años nos toca oír en las noticias que se han perdido o han pasado noche un grupo de personas o una persona porque se ha desorientado tras cogerle la noche o porque las condiciones en la montaña han cambiado y se han desorientado de repente. A mi en alguna ocasión me ha cogido la niebla terminando alguna ruta en la nieve y os aseguro que a pesar de conocer perfectamente el recorrido que estaba haciendo, era muy difícil distinguir donde estaba el suelo y donde el cielo, pues todo era blanco a tu alrededor y no tenías ningún punto de referencia para poder orientarte. Prefiero curarme en salud y echar esta pequeña charla que ver, como siempre veo a gente en zapatillas de tenis y vaqueros dando vueltas por la nieve, muy cool todos ellos.


En nuestro recorrido empleamos unas cuatro horas aproximadamente, entre ida y vuelta, el recorrido, siempre según los carteles era de dos horas y media ida y otras tantas de vuelta, pero estos tiempos siempre son aproximados. Unos tardarán más tiempo y otros menos. Como era la primera vez que me acompañaba Jesús en estas rutas, nos fuimos parando muchas veces para levantar la cabeza, ver el paisaje que teníamos delante y hacer nuestras fotos para el recuerdo. Mientras, en cada parada, le iba explicando donde estábamos, que es lo que nos íbamos a encontrar más adelante, como debía de utilizar los bastones en los distintos desniveles por los que pasábamos, los avisos de hielo en el suelo y las otras sendas y rutas que salían desde el punto en el que nos encontrábamos como por ejemplo, el puerto de Candelada, la ruta al Morezón, el acceso a Cinco Lagunas desde el Circo de Gredos, el Almanzor, el Puerto del Peón, la Mira, donde se encontraban los refugios en la zona…., son muchas las rutas y recorridos que hemos hecho por esta zona con Alfredo, Jose, Depi, Hura, incluyendo alguna que otra pernocta, muchas veces de forma ilegal, pero imprescindible para poder llegar a nuestro punto de destino debido a las distancias que debíamos recorrer. (Mi preferida, los tres días que pasamos en los Pirineos)


Otra cosa importante cuando realizamos un paseo al aire libre es el hecho de que nuestra presencia no tiene que dejar huellas en la naturaleza, por lo que tenemos que llevar una bolsa para poder bajarnos todas las basuras que produzcamos, aunque sean biodegradables, pues su presencia no es bio-agradable y a todos nos gusta encontrarnos las cosas limpias, es por ello por lo que todos tenemos que contribuir a la conservación de todos nuestros espacios verdes. Se que me dejo mucho en el tintero, pero es una actividad de la que disfruto mucho y de la que se podrían hacer monotemas y alargarnos todo lo que quisiésemos tanto con mi pequeña aportación como con la de todos que los nos seguís en este blog.


Intentaremos pasaros más rutas sencillas de realizar que no lleven más de cuatro o cinco horas de recorrido de este estilo y os invitamos a que si el frío y la nieve os hecha para atrás, que las intentéis hacer en primavera, pues merece la pena el paisaje, aunque tengáis que llevar más cantidad de agua, gorra y crema protectora. Al final de la jornada, Jesús más feliz que un niño con zapatos nuevos



Un saludote,

Antonio y Jesús.


MAS FOTOS
http://picasaweb.google.com/BEKELE666/ATLETISMOPOLANCIRCODEGREDOS#

15 feb 2010

SAN VALENTIN Y PINGÜINOS








El Pasado Domingo, día de San Valentín, Bekele tenía pensado, salir a hacer una tirada larga ya que está muy cerca el Maratón de Barcelona y quería probar a hacer unos 30 kilómetros para ver como iba a reaccionar el cuerpo. (al final nos salieron 31.500)



Mientras me lo contaba en nuestra jornada de los viernes, ese viernes hicimos unos 12 kilómetros, le dije que seguramente le iba a acompañar ya que hay otro refrán nuestro que dice que para que me lo cuenten, lo cuento yo y así fué



Impresionante el frío que nos esperaba a las 9,30 de la mañana cuando quedamos los dos, aunque parecía que el sol iba a salir y que toda la ropa de invierno nos iba a sobrar, nada más lejos de la realidad.



Nada más salir, mientras todavía íbamos por las calles del pueblo, nos entró la risa ya que quedaban hielos del anticongelante que llevaban en el cuerpo la gente que participó en las carrozas del carnaval y que no se había deshecho durante toda la noche.



Decidimos empezar a correr al pasar la Cooperativa de Aceite para calentar directamente sobre tierra y desde allí, cogemos el camino que nos lleva directamente a Bañuelos, una finca que ya os hemos enseñado en muchas otras ocasiones de la que sobre todo destaca la belleza de sus paisajes y la cantidad de agua y arroyos que la surcan por todos los lados y sobre todo este año, que con la cantidad de agua ha caído, están manando todas las fuentes y arroyo como si estuviésemos en el Norte.



Los primeros kilómetros los utilizamos para comentar cuál ha sido la comparsa que más nos había gustado de los carnavales y comentar lo bien o lo divertido que iban “fulanito” o “menganito” con el disfraz que llevaba y sobre todo el frío que habían pasado o la “Noche Toledana” que nos toco. (mi coche por la mañana parecía un congelador viejo, lleno de escarcha por todos lados)



Sin darnos cuenta y entre risas nos encontramos en el carreterín del borril, en las casas de Bañuelos. A partir de aquí se acaba la civilización y no nos encontraremos más casas en nuestro recorrido hasta que volvamos a salir al Palacio de Ventosilla. (estamos hablando de que nos metemos en el monte bajo durante unos 10 o 12 kilómetros hasta que nos podamos cruzar de nuevo con algún coche).



Mientras vamos descendiendo por el borril, lo primero que nos sorprende es la cantidad de agua que lleva el arroyo que cruza la finca, que gracias a que pusieron un puente cuando arreglaron el camino, podemos pasar sin tener de mojarnos los pies, ya que cuando lo atravesábamos antes de que fuese arreglado e íbamos subiendo en bici es el típico arroyo donde metes el pie hasta el tobillo cuando das la pedalada.



Vamos siempre disfrutando del paisaje y comentando las huellas de corzos y jabalíes que nos estamos encontrando durante todo el recorrido y sobre todo que gracias a estas lluvias, parece que vamos por una pista de atletismo ya que según pisamos, el terreno cede un poco, cosa que nuestras articulaciones agradecen en todo momento, sobre todo con la acumulación de kilómetros que vamos a tener al final del recorrido.



Esta ruta tiene un gran punto de inflexión, ir hasta el Palacio, 90% cuesta abajo y caminos blanditos de tierra y a partir de aquí, unos 15 kilómetros de la “Carretera de Ventosilla” para los que no la conozcan, es la CM 4009 que para los que somos de la zona es la Carretera de la Puebla (zahorra con pegolán, ya que los vecinos de Polán estamos cansados de que pase el camión de los parcheos y guarreos y por favor, que nos hagan la carretera nueva ya). Lo siento por la proclama pero es que creemos que es la carretera peor conservada de toda Europa, son tantos los baches que tiene que puedes elegir si pillar el de la derecha o el de la izquierda.



Pasado el párrafo de “proclamas” continúo con nuestro día de running. Antes de llegar al Palacio decidimos hacer nuestro pequeño avituallamiento ya que lo que nos queda a partir de aquí es el duro asfalto.



Vamos comentando que el frío cada vez es mayor y que no se nos pasa ni en las cuestas arriba así que manos a la obra y a por la primera cuesta ya que desde aquí todo el recorrido es cuesta arriba. Al poco tiempo, le doy un toque a Bekele ya que a unos 200 metros de nosotros se nos cruzan por la carretera cuatro Jabalíes pequeños, cosa que nos deja un poco perplejos y estamos un poco alerta por si pasa la Madre en cualquier momento. La broma que le digo es que como esto siga así vamos a tener que sacarnos la licencia de caza también para poder correr, ya que la última vez que estuvimos corriendo por aquí se nos cruzaron dos Corzos y eso que la zona nuestra ha sido siempre zona de Caza Menor (Paloma, Perdíz, Conejos y Liebres)y nunca habíamos visto este tipo de animales.



Mientras comentamos la jugada, vamos mirando el cronometro y haciendo nuestros cálculos mentales de cuanto tiempo tardaríamos en hacer el maratón. Al final de la jornada, hemos empleado unas dos horas y cuarenta minutos aproximadamente y unos dolores de articulaciones por haber subido por la carretera que todavía duran mientras escribo esta crónica y hemos conseguido durante todo el recorrido tener un buen feeling de cara al maratón de Barcelona ya que hemos acabado con un buen ritmo y los dolores han sido por la carretera y no por los kilómetros.



Un saludo y hasta la próxima

ANTONIO

9 feb 2010

DOS LEGUAS DE LEGANES


DOS MILLAS DE LEGANES


ANTONIO Y ALFREDO



Domingo por la mañana y mientras nuestros compis ( VICMAN Y BEKELE ) tienen previsto hacer tiradas largas preparatorias para el maratón de Barcelona, Alfredo y yo teníamos previsto probar las Dos Millas de Leganes. (11 Km y pico)

Llegamos con tiempo para poder coger los dorsales con tranquilidad y sin prisas y sobre todo para seguir cumpliendo la tradición y tomarnos nuestro café antes de la carrerita.

Mientras estamos calentando empiezo a comentar con Alfredo que el DJ´s que ameniza la carrera tiene “deje” como decimos nosotros. (en próximas crónicas os explicaremos el concepto de “andancio”, con la colaboración de nuestro Doctor, Luis Miguel)

La broma que le comento a Alfredo es que si los Catalanes tiene las Sardanas, los Maños las Jotas, los habitantes de Leganes, tienen a los AC/DC, aparte del monstruo del Lago de Butarque. Durante toda la carrera lo único que sonaba en los altavoces eran los AC/DC, en sus diversas épocas y cuando no, los Blind Guardian. Creo que esta vez me tocaba estar motivado a mi. (y allí estábamos Florentino Fernández y Santiago Segura.).



Como siempre digo, el mundo es un pañuelo y como no, mientras calentábamos, estuvimos saludando a nuestros compañeros de Toledo, tanto a la gente del Club Puerta de Bisagra como a los Fondistas Toledanos Club Atletismo Toledo ,  Aurelio por su reportaje fotografico y a todos aquellos con los que coincidimos siempre (como se nota por donde vamos, ya que parecemos una gran familia). También, estaba pensando que si estaba en Leganes, me debería de encontrar con un antiguo compañero de la facultad, Oscar “Cramps” ya que desde pequeñito había estado vinculado con este mundo del running y estando en su ciudad, lo que parecía buscar una aguja en un pajar, la encontré y estuvimos charlando un buen rato, tanto al inicio como al final del recorrido (llevaba 12 años sin verle y aproveche la ocasión para volver a quedar con él en la Media de la Latina, ya que me confirmo su asistencia). Desde aquí aprovecho para enviarle un saludo a él y a sus colegas, nos vemos en la Latina.

La salida fue puntual y antes de salir, la organización ya nos avisó de que tuviésemos cuidado al principio ya que el recorrido discurría por calles muy estrechas y había que estar atento a todos los obstáculos que nos podríamos encontrar.

Poco a poco fuimos dejando el asfalto y nos metieron por la tierra, terreno que nos gusta mucho y que utilizamos para poder ir cogiendo poco a poco nuestro ritmo de carrera. Como siempre, pedí permiso a Alfredo, condición indispensable, para poder tirar a mi ritmo ya que Alfredo tenía molestias en la espalda (eso es que anunciaba que el tiempo iba a cambiar y mira tu por donde, mientras escribo esta crónica, está lloviendo…., si es que las cosas de los viejos hay que tenerlas en cuenta).

En el kilómetro 6 la gente que tenía a mi alrededor ya iba comentando que teníamos que empezar a mentalizarnos para la gran cuesta del kilómetro 8 (la del Cementerio) y ya sabemos porque pasaba por allí. De ir cuesta abajo casi todo el recorrido, nos enchufaron un desnivel de golpe como quien sube una montaña. No era para tanto, pues era una cuesta muy corta, pero muy intensa. La gente se agolpaba en los laterales como en el Tour de Francia o en la subida al Angliru animando a todos los que íbamos con la cara desencajada y los ojos fuera de las orbitas…. je, je.

Cuando llegué arriba, me di cuenta de que no tenía gente ni delante ni detrás, salvo un chico que me dijo que entre los dos teníamos que terminar hasta el final y…. vaya final. (el comentario posterior de Alfredo es el mismo, la gente se clavó en la cuesta). Tenía más pinta de profesional que de aficionado y me impuso un final de carrera espectacular. Entre los dos, hicimos los dos últimos kilómetros a un ritmo muy elevado y por su puesto el favor le fue devuelto, pues ya que me había llevado hasta el final siguiendo su ritmo, me tocaba a mi trabajar y hacer que él pudiese hacer la última recta antes de meta dando todo lo que me quedaba. Total, que llegué sin aliento pero con una sonrisa de oreja a oreja al ver los tiempos 46,34 (posición 199 y ritmo 4.11) y idem para Alfredo 48,19 (posición 283 y ritmo 4,21). GENIAL.

La anécdota de la jornada es que es la primera vez que ambos ganamos a “pecho lobo”, un clásico en todas las carreras en las que participamos. Hemos estado con él en la Latina, en Getafe, en los 100 Km y siempre iba con su mujer muy por encima de nuestras posibilidades, esto si que nos ha dado alas. Si queréis saber de quién se trata, tendréis que ver el video de la llegada y ver cuando entra Alfredo y quién están esprintando detrás de él. (esto si que da alas y no el red-bull), o bien las últimas nevadas de Madrid y el único que estaba corriendo en el retiro a “pecho lobo” y Madrid Nevado. (salió en el telenoticias de Tele-Madrid)

La organización, chapó un 10, nos quitamos el sombrero, había un montón de gente colaborando con ellos y se les podía ver en todos los tramos del recorrido, señalizando y dando ánimos. Al final hubo una demostración de un grupo de baile artístico, estilo “grease” como final de acto y también para animar al resto de vecinos de Leganes y al resto de acompañantes de los corredores.



Un saludo para todos y nos vemos en la Latina.



Antonio